Es normal que puede que lo veas como un sinónimo, pero existen bastantes diferencias entre un robo y un hurto, tanto en definición y ejecución del acto, como en todo lo relativo al mundo de los seguros.

Es más, dependiendo de si se trata de uno u otro, puede haber exclusiones en la cobertura de una póliza de seguros.

Para salir de dudas y que tengas todo claro, a lo largo de este artículo te vamos a explicar la diferencia entre robo y hurto y qué cobertura ofrecen los seguros de hogar tanto en uno como en otro caso.

¿Qué es un robo?

El robo utiliza el uso de la fuerza, intimidación o violencia para sustraer bienes. Aquí pueden entrar conceptos como rotura de cerraduras, amenaza a las personas de la casa o el uso de armas, por ejemplo.

Al final, un robo tiene naturaleza violenta de cualquier índole. Un ejemplo para que lo entiendas bien: si alguien rompe una ventana de una casa y se lleva objetos de valor, se considera un robo.

¿Qué es un hurto?

Un hurto, por su parte, implica la sustracción de bienes sin el uso de la fuerza y generalmente ocurre sin que la víctima en cuestión se dé cuenta.

Un hurto, al final, es algo más sutil, silencioso, propio de un ninja que actúa entre las sombras. Para que lo entiendas, un ejemplo claro: si dejas el móvil tirado en algún sitio público sin darte cuenta y alguien se lo lleva, esto se considera un hurto.

¿Cuál es la diferencia entre robo y hurto para el seguro?

Como puedes ver, ambos implican la sustracción de un bien, pero hay una diferencia clave entre robo y hurto en cómo se sustrae ese bien y sobre todo en cómo los trata la póliza de cualquier seguro.

El robo, al tener una naturaleza violenta, es más fácil de demostrar y por ese motivo está dentro de cualquier póliza de seguros.

Por su parte, el hurto es mucho más difícil de detectar, puesto que no ha habido signos de entrada forzada o violencia y, por ese motivo, no suele estar cubierto por un seguro de hogar.

Para resumir, la diferencia entre robo y hurto para el seguro es que el primero siempre está dentro de la póliza, mientras que el segundo no suele estar cubierto y depende las condiciones de la póliza que hayas contratado.

¿Qué cubren los seguros de hogar en cuanto al robo y al hurto?

Los seguros de hogar suelen ofrecer cobertura para incidentes como el robo y, en algunos casos, el hurto.

Como podrás imaginar, todo depende de la póliza que decidas adquirir, ya que a mayor inversión, mejor protección, pero generalmente hay varios puntos que se cubren sin tener que desembolsar más que el precio base.

Una cobertura de robo cubre los daños materiales de la vivienda como la reparación de puertas o ventanas, así como de otras partes de la propiedad como paredes o cercas causadas por el robo, la devolución de bienes personales con reemplazo o compensación por bienes robados en dispositivos electrónicos, electrodomésticos, joyas, muebles u otros objetos de valor y gastos adicionales como asistencia de emergencia como servicios de cerrajería, vigilancia temporal o gastos de alojamiento por si el hogar queda inhabitable durante un tiempo.

También pueden entrar aquí los bienes en el exterior, es decir, los objetos en jardines, garajes o anexos, aunque estos suelen estar sujetos a límites específicos.

En lo que se refiere a la cobertura de hurto, entran en juego el hurto de objetos personales, aunque está sujeto a condiciones más estrictas y límites específicos, así como a electrodomésticos y dispositivos electrónicos, pero generalmente necesitan de una cláusula adicional en la póliza.

A pesar de estas diferencias entre robo y hurto, hay una serie de consideraciones generales que piden los seguros, como sistemas de seguridad en la vivienda, pruebas de fuerza para que un incidente se considere un robo e informe policial para hacer una reclamación.

En este sentido, lo mejor es contar siempre con un buen seguro de hogar como nuestro seguro de MAPFRE a lo Yoigo, que cubre este tipo de problemas y cualquier imprevisto para que puedas respirar tranquilo. Además, si eres cliente de Yoigo obtendrás descuentos todos los meses en tu factura de teléfono.